El análisis DAFO es una herramienta para analizar la realidad de un negocio y así tomar las estrategias y las futuras decisiones. Un instrumento de reflexión sobre la situación de nuestra empresa que nos orientará para definir el camino que lleve a superar las debilidades, controlar las amenazas, potenciar las fortalezas y beneficiarse de las oportunidades.
Vamos a profundizar y ver qué es un DAFO definiendo las características internas de la empresa y la situación externa que brinda el mercado.
¿Por qué hacer un DAFO?
Con el análisis DAFO se pretende estudiar a la propia empresa y al mercado exterior. Nos puede servir como punto de arranque entre la fase análisis de negocio y la fase estratégica. Por tanto, DAFO es una herramienta muy importante a la hora de fijar nuestros objetivos presentes y futuros. Así pues, el objetivo de este análisis será el de determinar las ventajas competitivas de la empresa y la estrategia genérica a emplear que más nos convenga en función de nuestras características propias dentro del mercado en el que se mueve el negocio.
Un exitoso análisis DAFO nos permitirá saber en qué punto se encuentra nuestro negocio, en qué consiste y qué ventajas tenemos frente a las desventajas.
A continuación, vamos a ver cómo hacer correctamente un DAFO.
¿Cómo hacer un DAFO?
El análisis DAFO consta de dos análisis, el interno y el externo, en los cuales se reparten en cuatro diagnósticos: debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades.
Dicho análisis se debe presentar en forma de matriz, con cuatro ejes que forman cuatro casillas que servirán de contenedores para el diagnóstico. Dicho diagnóstico debe contestar a las cuatro preguntas estratégicas con la máxima información requerida.
Para que sea un buen análisis DAFO debe ser objetivo y lógico, sin ignorar ni pasar por alto los aspectos negativos. Debe ser directo y conciso, sintetizando y resumiendo cada aspecto. También debe ser ordenado, claro, profundo y cualitativo, ya que un análisis DAFO bien realizado es esencial para la búsqueda del éxito de cualquier negocio.
Análisis Interno (Debilidades y Fortalezas)
Por un lado, en el análisis interno debemos localizar, enumerar y clasificar nuestras fortalezas y ventajas diferenciales frente a otros competidores, así como aquello que se puede llegar a considerar como debilidad o desventaja frente a nuestros competidores.
En la primera casilla del análisis DAFO se debe diagnosticar las debilidades, la parte negativa de origen interno. Se trata de aquellas carencias y limitaciones desfavorables que hacen menos bueno al negocio en comparación con la competencia. Corresponden a los puntos débiles de la empresa que debemos descubrir para poder mejorar posteriormente.
El otro aspecto de este análisis interno corresponde a la parte positiva de origen interno, las fortalezas. En esta casilla debemos destacar aquellos atributos y características favorables que hacen crecer y mejorar a la empresa y, con ello, destacar sobre la competencia.
Análisis Externo (Amenazas y Oportunidades)
Por otro lado, en el análisis externo debemos considerar todo aquello que puede llegar a ser una amenaza dentro del contexto en el que opera el negocio y que podría poner en riesgo a la empresa, así como las oportunidades que se deben aprovechar del entorno en el que se opera en busca del máximo beneficio.
Por tanto, en las dos siguientes casillas del análisis DAFO se tendrá que diagnosticar aquello relacionado al entorno externo que se desenvuelve en el mercado, con el fin de descubrir las amenazas y las oportunidades.
Las amenazas son la parte negativa de origen externo y se trata de aquellos factores desfavorables, que conviene vigilar y estar en alerta ya que pueden llegar a impedir el éxito del negocio.
En cuanto a las oportunidades, los aspectos positivos que provienen del exterior, se refiere a aquellos factores favorables de origen externo que bien aprovechados pueden beneficiar en la consecución del éxito del negocio.
Conclusión
En definitiva, el resultado del análisis DAFO, con los cuatro diagnósticos, nos proporcionará el camino para proponer estrategias y acciones en búsqueda del éxito. Con este análisis obtendremos información valiosa de cuáles son los mayores riesgos del proyecto, cómo solucionar lo negativo y cómo escapar de las amenazas, fijar oportunidades y metas realistas, enfocarse en aquello que se deba fortalecer y aprovechar y evitar que las debilidades nos penalicen y nos lastren.
El análisis DAFO es una herramienta clave en el plan de negocio ya que resume la viabilidad y capacidad para llevar un proyecto a cabo.
Una vez realizado el análisis de nuestra situación en el mercado, será el momento de llevar a cabo el estudio de la competencia.
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